Bienvenidos a Dublín, una capital moderna con una historia muy rica y atractiva que la convierte en un destino muy deseado durante todo el año y más durante las vacaciones de verano, sobre todo para quienes quieren aprender inglés en el extranjero. Dublín atrae a turistas de todo tipo: a los amantes de la naturaleza, a los más urbanitas, a intelectuales y a los más ociosos. Es una de las ciudades europeas más fácilmente identificables y entre sus grandes ventajes está su tamaño para disfrutarla de muchas maneras y en un solo viaje… aunque siempre querrás volver.
Temple Bar es la zona, así de simple. Donde se respira el auténtico ambiente irlandes, con sus coloridos y ornamentados pubs irlandeses. Miles de nativos y turistas pasean por aquí en busca de refrescantes pintas de cerveza y actividades culturales a pie de calle.
Erigida en honor de San Patricio, el patrón de Irlanda, esta catedral es una de las iglesias más importantes de Dublín. En su interior podemos conocer buena parte de la historia de Irlanda gracias a los bustos y monumentos sepulcrales que alberga.
El castillo de Dublín situado en pleno centro de la ciudad ha sido testigo y protagonista del transcurso de Dublín durante siglos cumpliendo con muchos papeles: desde lugar de asentamiento de los vikingos, fortaleza militar, hasta residencia real, sede del Tribunal de Justicia Irlandés y sede de la Administración Inglesa.
Es uno de los parques públicos más antiguos de Irlanda. El estilo victoriano enmarca este punto de encuentro que incluye un precioso estanque con gaviotas y cisnes.
Los duendes están muy arraigados a la cultura y mitología irlandesa. Este museo ofrece durante su recorrido la posibilidad de sentirse un leprechaun más con escenarios agigantados.
La antigua cárcel de Kilmainham ha sido el destino de muchos de los personajes implicados en la lucha por la independencia de Irlanda durante más de un siglo. Todo un símbolo de resistencia para los irlandeses.
Fundada en 1592 por la reina Isabel I y considerada como la mejor Universidad en Irlanda en diversas listas de clasificación mundiales. La visita a la Biblioteca del Trinity College es obligada e impresiona por la arquitectura de su gran sala que ofrece la mayor colección de manuscritos y libros impresos de Irlanda.
Levantada en 1904 como lugar de fermentación de la cerveza Guinness, por todos conocida a nivel mundial. Podemos recorrer todo el proceso de su fabricación a modo de museo y disfrutar de su gran bar mirador de la azotea mientras disfrutamos de una pinta de sabor inigualable.
Con su llamativo estilo arquitectónico del neoclásico levantado en el siglo XVIII, Custom House es uno de los edificios más fotografiados aprovechando su famoso reflejo a orillas del río Liffey.
Uno de los edificios neoclásicos del siglo XVIII más destacables de Europa concebido como casa de recreo para las fiestas y celebraciones del primer conde de Charlemont.
El tercer recinto deportivo más grande de toda Europa con capacidad para 82.300 espectadores sirve como estadio multiusos para todo tipo de eventos deportivos y de espectáculos en la ciudad y como sede de la Asociación Atlética Gaélica, la organización deportiva más grande de Irlanda.
Aprende la historia de Dublín divirtiéndote. Conoce la vida de la ciudad durante la época medieval y acércate más a las historias de vikingos que tanto arraigaron en Irlanda.
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